Si alguna vez tiene la ocurrencia de extraerse una pieza dental por el expeditivo procedimiento de tirar de una cuerda, sepa que esta seguramente se romperá antes de que salga el causante de su tormento; a no ser que el diente esté tan debilitado que acabe por desprenderse. Eso sí, siempre se quedará dentro la raíz, lo que entraña un grave riesgo de infección.
Los dentistas utilizan instrumentos específicos: sindesmótomos para liberar el ligamento gingivodentario -fibras elásticas que sujetan la raíz y amortiguan el diente contra la encía y la mandíbula-, fórceps y elevadores para sacar las esquirlas que aún pudieran permanecer en el interior del alvéolo dental.
FUENTE: http://www.muyinteresante.es/curiosidades/preguntas-respuestas/ies-peligroso-arrancarse-un-diente