Dolor, hinchazón o ardor. Los problemas bucales a menudo suelen ser muy molestos. Para evitar que se agraven, resulta fundamental saber cómo reaccionar en las emergencias orales.
Según Sibele Penha Sarti, profesora del Servicio de Urgencia Dental de la Facultad de Odontología de la Universidad de San Paulo, en Brasil, cualquier situación atípica en la boca debe ser examinada y tratada por un especialista, pero algunos trucos sencillos aminoran el dolor y curan o previenen accidentes.
Diente roto por un choque Cuando se rompe sólo una parte del diente, la recomendación es sumergir el fragmento en una solución salina, en leche, o (en el último caso) en agua filtrada y buscar un dentista. Si se rompe el diente por completo (con raíz), el tiempo será determinante para resolver el problema. En este caso, el diente debe ser sumergido en el líquido del mismo ejemplo anterior y se debe buscar inmediatamente un dentista, porque es más probable que el re-implante tenga éxito si es hecho en hasta una hora después del accidente. Cuanto más tardes en acudir al dentista menor será la posibilidad de recuperarlo.
Lengua o labio mordido La boca tiene muchos vasos sanguíneos y por eso la mordida en la lengua o en el labio causan el sangrado. En estos casos, es recomendable poner una gasa o algodón en la zona magullada durante 10 minutos. Evitar escupir es importante para que no se mueva la región. Además, se recomienda comer alimentos fríos y blandos durante los próximos días y un cepillado dental reforzado para evitar cualquier contaminación en esa parte.
Boca quemada No hay mucho que hacer cuando se quema la boca. Es necesario esperar para la regeneración del tejido, que suele tomar una semana.
Herpes frecuente Hay algunos factores que pueden desencadenar la manifestación de este virus como la exposición a la luz solar, el estrés y el frío. Al tener herpes, es esencial evitar la manipulación de la región (como rascarse, por ejemplo). Hay cremas y ungüentos especialmente para este tipo de problema. El odontólogo puede prescribir.
Afta Las aftas necesitan una atención especial. Ulceraciones aftosas no tienen una causa definida, pero ciertos factores pueden desencadenar su aparición como alimentos ácidos y el estrés. Si este es el caso, identifica el alimento que te está causando el problema y evítalo.
Las personas tienen el hábito de pensar que cualquier cambio en el revestimiento de la boca es un afta, cuando en realidad no es así. Por ejemplo, las úlceras que no se resuelven en dos semanas deben ser examinadas por un profesional. Las lesiones de cáncer oral pueden empezar como una pequeña úlcera indolora.
Irritación y rajaduras La exposición prolongada al sol y al frío puede causar estas grietas y erupciones cutáneas. Para evitarlas, el paciente debe mantener hidratada la región (por ejemplo, usar manteca de cacao). Las personas que pasan mucho tiempo expuestas al sol deben usar protector solar labial.
Fuente: https://fundacioncreo.org.ar/